Entrevista de Julio Herranz a Erwin Bechtold en el periódico Última Hora.

«Con dirección de Enrique Villalonga y la colaboración de Laura Ferrer y Julio Arche, la productora ibicenca Factoría Difácil ha realizado el documental ‘Erwin Bechtold, retrato de un artista’, estrenado el pasado octubre en la 54ª Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci).

-¿Qué le ha parecido el resultado del documental?

-Cuando me lo propusieron, al principio tenía mis dudas, porque no es tan fácil hacer un trabajo así sobre un artista como yo, que soy alguien muy normal. Otra cosa habría sido sobre gente divertida y que está de modo. Creo que han hecho un trabajo fantástico, maravilloso sobre un artista, logrando también una obra de arte.

-¿Satisfecho, pues?

-Desde luego. Es sorprendente que les haya salido un producto tan profesional viniendo de gente tan joven y con poca experiencia. Es normal en esta isla que se tengan sueños e ilusiones, pero se suelen perder en el camino. Raras veces encuentras iniciativas de ese ímpetu con tan buen resultado. Y fíjate, lo seleccionaron para presentarlo en el Festival de Cine de Valladolid (la Seminci). También me alegra especialmente que haya sido hecho en Eivissa; señal de que hay algo creativo que flota por la isla.

-¿Le hubiera gustado que participara algún invitado más?

-Yo no he querido intervenir demasiado en el contenido. Es su trabajo, y ellos son los que decidían cómo hacerlo y quienes participaban en el documental.

-Supongo que le habría gustado que saliera Tàpies, con quien tiene tan buena relación desde hace tiempo.

-Hombre, habría estado muy bien, claro; pero siempre está muy delicado de salud, algo normal en él de toda la vida; aunque últimamente parece que va más en serio.

-Parece también que, en su nombre, se homenajea al Grupo Ibiza 59 en su cincuentenario.

-Parece; por eso en la presentación pondré una muestra de carteles emblemáticos de exposiciones del grupo y de los que yo he hecho en estos 50 años.

-Hablando de carteles, ¿le gusta la carátula? Parece un guiño a su propia creación.

-Sí, es precioso; hasta tengo cierta envidia, porque como yo también expongo carteles… Creo que tiene la misma calidad.»